Let us die young or let us live forever we don't have the power but we never say never

Love

miércoles, 1 de mayo de 2013

Me vale cualquier jeringuilla para inyectarme tu risa.

No quiero que vuelvas, quiero que te vayas, que te vayas lejos y desaparezcas, quiero empezar de nuevo con otra persona, alguien cuya existencia aún desconozca, pero que dentro de unos meses sea como el soplo de viento que incita a un pájaro a volar por primera vez.
Quiero quererlo tanto o incluso más de lo que te quise a ti, y sé que es cierto que sería sobrepasar el límite, pero estaría dispuesta a ello. Estaría dispuesta a arriesgar.
Quiero pasar horas con él, quiero días que empiecen en besos en una cama, sigan rodeados de cervezas y música, películas, paseos y vuelvan a acabar con besos en cualquier sitio, hasta que sin darnos cuenta, haya amanecido y esas cervezas nos estén esperando.
Quiero que tenga detalles, pero cada mucho tiempo para poder apreciarlos más, no hace falta que me diga que me quiere cada segundo, si me lo demuestra con hechos, podría ahorrar saliva y emplearla en mejores causas. 
No quiero que dedique sus manos en levantar pesas en oscuros gimnasios, quiero que dedique esa habilidad en rozar las cuerdas de su guitarra por cualquier rincón.

Quiero que me ame y quiero que me folle, pero de corazón.